martes, octubre 17, 2006

Certezas

En mi casa tengo dos puertas y, cada una su llave, muy parecida.
Cuando quiero abrir solo me confundo si, justo antes de usarlas, pienso
¿será la correcta?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

A veces me pregunto si los pensamientos que nos llegan nos hacen reflexionar o simplemente nos enmudecen....
me gustan tus post.

VeRsAtiLiDaD dijo...

y la gracia de acercarse cada vez mas al paño de llave y pensar ya veras sera la otra.
lo mejor es hacer justamente lo contrario de lo que uno cree.

Anónimo dijo...

Es el síndrome que dicen que sufría Nelson, ocurre a las personas reflexivas. A Nelson le costaba recordar si estribor era derecha y babor era izquierda, o al revés. Por eso, cuenta la leyenda que, antes de entrar en combate, bajaba discretamente al camarote del capitán abría un cofre y leía un papel. Luego subía y empezaba a impartir órdenes con gran efectividad. Claro, el problema en tu caso es que si dejas el cofre en casa no vas a tener forma de entrar a mirarlo sin errar la elección de llave. Anda y cómprale una anilla de colores que cuestan 10 céntimos ;o)